15 diciembre, 2007

Vagamundos

Estábamos tan unidos que ya no sabíamos donde terminaba un cuerpo y empezaba el otro. Con una sola mirada, sabíamos si era hambre, sueño, sed o demasiado sol sobre nuestras cabezas. Si era así, despegábamos nuestros cuerpos de la vereda y nos cobijábamos bajo un árbol de la plaza. Siempre en los mismos lugares, nuestro hogar. Él se echaba primero, enrollado con la cabeza entre sus patas, luego yo me recostaba en su regazo. Debo confesar que a veces sentía envidia, a él siempre le decían que bonito o tierno el perro. Pero nunca, nunca escuché algo bueno sobre mí.

11 octubre, 2007

A veces

A veces por la mañana, no comprendía cómo todo seguía funcionando. Pero se levantaba igual, pensaba que quizás esa funcionalidad era sólo aparente. Imaginaba que tal vez, si frotaba una hoja aparecería su color verdadero, o de pronto todos comenzarían a mezclarse. Como el agua, el reflejo y la pintura. ¿No era eso también real?

A veces por la tarde, todo le parecía armónico y soluble como el azúcar en el café, dulcemente suave. Ya no le preocupa si los reflejos son o no verdaderos, o si todos verán los mismos colores. Bajo el cielo violeta anaranjado, alguien se para a su lado y le dice: ¿no son preciosos los verdes atardeceres? Ella feliz asiente diciendo que son sus colores favoritos, le encanta saber que no vemos lo mismo. La realidad es a veces tan subjetiva.

A veces por la noche, olvida su asombro y a ratos le parece todo tan monótono. Y mientras mastica los restos del día, piensa que quizás es suficiente con lo que le han dicho, ya no quiere más asombros. Pero intempestivos los recuerdos aparecen igual. Ahora duda si cuando le dijeron que con ella todo era como una película, era una forma extraña de halago o sólo querían decirle que todo era irreal.

11 septiembre, 2007

Por qué

Por qué me pregunté
y te pregunté,
por qué
No sé, por qué
¿Debe haber un por qué?
Por qué pregunto por qué
si yo misma no lo sé
¿Por qué?
Aún puedo dormir
¿Por qué?
No puedo mantener los ojos abiertos
y pensar todo el tiempo
No sé, ¿por qué?
El cansancio
Tal vez
Dime algo
que no sea lo que estoy pensando

18 agosto, 2007

Seguros por naturaleza


Como segurito jojo...hablando en serio me pareció sumamente curioso y algo contradictorio. Aunque han de saber que la planta es de plástico. Entonces tal vez hasta el metal sea más natural. No sé si se alcanza a ver, pero será, sino me avisan y lo borro.

09 julio, 2007

No hablo con extraños



un dos tres por mí! ya se vienen las poleras y todo eso jajaj menos para la Pame que si habla con etraños y es más con extraños muy extraños!
De repente pensé que puesto así como señal de vía pública debería ser No hablar con extraños...no, no hablo con extraños pero bue...se puede arreglar. Y si sé que todos son extraños en algun momento...y obvio que si no hablaras nunca con ningun extraño no hablarías con nadie...espero que se entienda.

03 julio, 2007

Nosotros

Me subí a la micro, las piernas aún temblorosas, el efecto de hablar frente a frente. Me senté en un asiento del pasillo, como siempre. Así no tengo que pedirle permiso a nadie si quiero bajarme, sonreí al pensar que cosas tan pequeñas y cotidianas me hacen sentir como si tuviera un cierto control sobre mi vida. Aunque al mismo tiempo mi organismo me hace sentir una vulnerabilidad e inestabilidad increíble. Es increíble. Las acciones, las palabras: nunca sabremos lo que en “verdad” significan. Porque la interpretación, como una muralla, se interpone entre nuestra empatía. Y yo quiero tratar de romperla, pero a veces siento que es romper algo dentro de mí. Me duele. Me asusta. Cambio. Me detengo. Me pregunto si no estaré haciendo algo absurdo y sin sentido. Etéreo como la vida. Cómo todo esto cabe dentro de ésta micro que tiembla completa con cada bache de la calle. Ni siquiera eso. No existen, no hay pensamientos. Son solamente sustancias químicas estimulando mis neuronas. Pero cómo entonces puede doler algo que no es físico,¿será solamente química?. No tengo respuestas, no sé si me importan realmente. Pueden ser tan transitorias y si cambias la pregunta ya no están. Y es tan fácil cambiar la pregunta, ya que nunca me parece encontrar la exacta (para poder siquiera pensar la respuesta que necesito). La micro frena, mi rodilla impacta contra el siguiente asiento y mis pensamientos con los hechos inmediatos. La gente camina. Yo los miro un rato pero me pierdo de nuevo en mi universo paralelo. Pensé en todo lo que ya no tendría y unas lágrimas se asomaron en mis ojos. No nos gusta perder parece, nos gusta tener. Pensar en el futuro como un “lugar” mejor. Se me confunden tiempo y espacio. Pero sea como sea, es siempre ilusorio, nada va a ser como lo esperas. Es muy variable y no se puede controlar. Yo no puedo. No me resulta. Tal vez a otros sí. Miro a mi lado, otra persona sentada en el pasillo. Igual que yo ¿pensará lo mismo? ¿Sentirá lo mismo? Entones pienso y me critico, no debería hablar en general. Yo. No debería decir nos. Yo. No sé lo que piensas tú. Ni mi otro yo. No sé lo que sientes tú. O podría saberlo pero nunca sentirlo. Cómo podemos entonces convivir si nuestros límites nos impiden comprendernos, sentirnos, relacionarnos. No hay límites pero los vemos. Los veo. Así aprendí. O así me enseñaron. Miento. No los veo, pero miento sin querer, ¿me hace eso inocente? ¿Importa la inocencia si igual me siento mal? Mis límites. Debo tenerlos. Deben existir. Sino, podría hacer todo. Nada me importaría. Pero me afecta. Me importa. Me limita. Como estos metales y vidrios que me separan del ambiente exterior. Están entremedio, implícitos. Se podría llegar a pensar que no existen. Pero ahí están, entre nosotros. Yo y el entorno. Tú y el entorno. Tú y ellos. Ellos y yo. Sin embargo, ellos no son “ellos”, son yoes separados por lo inexistente. Igual que tú y yo; los miles de yoes y tues no hacen un nosotros.

23 junio, 2007

19 junio, 2007

Hambruna psicosomática.


Era esa hambre que no se pasa ni con diez mil vacas asadas.
Esa hambre que me da arcadas cuando tengo al frente un pastel de choclo.
Esa hambre que no es de comida, sino de respuestas que no llegan.
De cosas que no se cierran.
De preguntas incorrectas.
De hechos inconcretos.
Esa que me hace sentir el estómago lleno de vacío.
Y que acrecienta las líneas de mis manos.
Y las canas en mi cabeza.
La que me carcome los intestinos
Y me hace palpitar las sienes.
Quizás debería vaciar la mente para que haga juego con mi estómago.
Y así, llena de vacío acabaría con la hambruna.

30 mayo, 2007

¡Mujer aplastada por máquina de ejercicios!


"Yo siempre dije que el ejercicio no era sano, que iba contra mi religión y todo eso. Pero los médicos insistieron taaanto." Estas fueron las últimas palabras que escuchamos de la mujer que fue aplastada por su propia máquina de ejercicios en el día de ayer. Fuentes cercanas indican que la afectada plegó y guardó su SUPERFITNESSMACHINE, pero la puso en su closet. La empresa a cargo de la venta de dicho producto queda así liberada de todos los cargos. De todas formas se mostraron conmocionados con el hecho; estableciendo claramente que ellos siempre explicitaron que dicho producto se pliega y se guarda debajo de la cama. Llamando a la calma al resto de los clientes que siguen al pie de la letra las instrucciones.
No se tienen antecedentes claros respecto a cómo sucedió, pero se sabe que dicha máquina, de por lo menos 10 kilos, se precipitó sobre la mujer que intentaba seguir los consejos de sus cercanos para conservarse saludable. Resultó bastante lesionada y ahora se encuentra inconsciente pero estable. Esperamos que se recupere pronto.

En una próxima entrega analizaremos si es más peligroso andar en bicicleta o fumar una cajetilla de cigarrillos diaria, inspirada en una historia real.

22 mayo, 2007

La improbabilidad de las cabras

Un día llegué a mi casa y por la calle subía una "manada" o "rebaño" (disculpen la ignorancia) de cabras o chivos que iban comiéndose todo a su paso. Y por alguna razón me mantuvo con una sonrisa toda la tarde, será que me gustan las cosas improbables, o será sólo que al tener menos probabilidad me aporta más información? La verdad es que no lo sé y tampoco sé si me importa. Y es que es tan emocionante decir: ¡HAY CABRAS EN MI JARDÍN!

Nunca supimos si se habían perdido o si andaban con alguien que las guiaba. Lo cierto es que entre ellas sí había claramente un líder al que seguían. Y según una vecina dejaron literalmente la cagada cerca de la plaza o de su casa, no lo sé. Nosotros sólo las vimos golpear con la uña el tronco de un ciruelo y comer todo tipo de hojas que encontraran en su camino. Todos los autos (o sea la gente adentro de los autos)que pasaban miraban con sorpresa y desconcierto. Y cómo no, no son cosas que sucedan muy a menudo por aquí.


Como tampoco otras cosas, vaya a saber uno por qué, la vida es misteriosa y las cosas improbables y las requetecontraimprobables suceden a cada rato. Así que no sé porqué me asombro tanto cada vez que suceden. Quizás sólo para ponerle un poco de emoción a la vida. Después de todo que algo sea improbable quiere decir al mismo tiempo que es posible que suceda. Incluso si nunca pasó por tu cabeza que así sería...ehh creo que me enredé. Lo cierto es que pasan muchas cosas que estaban fuera de mis posibilidades,más o menos felices, pero es igual de increíble.

El verdadero punto es que quería poner fotos de las cabritas esas y siempre pensaba que tenía que escribir algo decente para ponerlas, ¡pero al demonio la decencia! si lo importante era el hecho y las fotos en la medida que lo retratan. Debo agregar que después desaparecieron sin más, probablemente volvieron por su portal espacio-temporal.

04 mayo, 2007

Los adultos no se caen.

Es raro a medida que creces te vas cayendo menos, y es quizás por eso mismo que te va causando más temor. Cuando eres niño frente a una caída medianamente fuerte hay varias posibles razones:
-querer alcanzar algo imposible
-correr sin destino y sin mirar el camino
-caminar sobre cosas inestables sólo para hacerlo más entretenido
-descoordinación por intentar llevar a cabo muchas cosas al mismo tiempo sin prestar la suficiente atención
-inexperiencia

Ahora las posibles reacciones son diversas dentro de las más comunes están:
-pararse como si nada y seguir corriendo mientras los padres miran con cara de tragedia
-llorar mucho y a gritos por el susto más que el dolor por un rato o esperando que alguien te venga a hacer cariño
-llorar y hacer pucheros porque los padres ya te habían dicho que no, y qué más desagradable que no tener razón
-mirar la herida con curiosidad un rato, curarla si es necesario y volver a jugar
-pararse y seguir corriendo para no perderse parte del juego

A medida que creces, sin embargo, esto no parece cambiar mucho. Adquieres más experiencia quizás, quizás a veces la suficiente para saber que no quieres seguir cayendo. Quizás engañosa que te hace pensar que los niños son más inmaduros. Pero que hay más maduro que caerse, ponerse de pie y seguir corriendo. Pero no, cuando estás más grande ya no te puedes caer, ya no puedes jugar a hacerlo más entretenido porque sí. Es inmaduro. Por primera vez siento que todas las veces que me lo han dicho en tono de reproche, sólo debería evidenciar lo graves que son algunas personas. Ser como un niño no debería usarse como insulto, desde hoy lo tomaré como un cumplido. Aunque hay cabros chicos pesados también, como adultos pesados no más en todo caso, pero con menos poder.

Yo una vez me caí de la bicicleta y me rasmillé la cara y un niño pesado se rió de mí, y claro yo estaba en el suelo asustada, no le encontraba la gracia. ¡Demonios! creo que eso contradice un poco todo lo anterior. En fin, será.

16 abril, 2007

nadie se da cuenta de nada

A ella le impactaba cómo él no se daba cuenta si era tan obvio. Lo miraba todos los días, quería saber hasta cuando chocaba con la misma puerta de vidrio. Ella creía que ponía a prueba su fuerza de voluntad al no decirle nada. Pues, para ella era tan obvio que esa puerta existía y que definitivamente se podía hacer algo para no chocar a cada momento. Planeaba miles de soluciones para él; o la abría hacia el otro lado, le pegaba un algo para notar su presencia, salía por otra puerta o algo quizás más difícil, intentaba recordar la existencia de aquel vidrio transparente. Pero al parecer él nunca lograría recordarlo, pues ella ya llevaba meses observándolo y no había caso de que frente a las mismas condiciones él actuara diferente. Y ese día decidió que le pegaría un sticker en la puerta para evitarle futuros dolores diarios. Se puso de pie y caminó decidida hasta que se golpeó contra un fierro los hombros, estaba encerrada, y no se había dado cuenta, siempre había pensado que era su gran fuerza de voluntad la que la mantenía allí. Se arrodilló en su enorme prisión apoyando la cabeza en sus rodillas. Y él como todos los días caminó hacia la puerta de vidrio, mirando tan concentrado al frente a esa mujer que siempre observaba pensativa entre sus barrotes como si tuviera toda la libertad del mundo. Pero hoy la vio triste y preocupado aceleró el paso, y una vez más se golpeó contra la puerta, pero esta fue la última vez, porque la puerta con el impacto se rompió.

28 marzo, 2007

Bolsa de minutos-fritos y mi nueva serie semi-favorita

El otro día me acordé, no me acuerdo por qué, de un comercial que me cargaba mucho, seguramente es porque nunca lo entendí entonces me hacía sentir horriblemente imbécil,¡y no acepto eso de los comerciales! quizás no era parte del público objetivo...mmmm.....

Bueno, la cosa es que habían 6 personas, 3 hombres y 3 mujeres, ellas estaban sentadas en un sillón comiendo algo, creo que eran papas fritas, que sacaban de unas bolsas de colores que decian, creo, 60 minutos, 30 minutos, etc...o algo así. Que supongo indicaban los planes telefónicos. Y ellos estaban parados y hacían mímica al frente pero ellas no adivinaban las de los 2 primeros, pero si la del tercero pooorque parece que tenía plata en su celular...o tenía un mejor plan....ya ni me acuerdo...así de mal lo entendí...o más bien NO ENTENDÍ NADA...

Las interpretaciones que saqué eran todas pésimas...adivinaron la mímica del último porque así las podía llamar por teléfono? o porque si tiene un plan significa que tiene plata? o los otros no tenían celular y eso era muy poco cool? estoy sumamente confundida, exijo una explicación. Así que, si alguien lo recuerda y lo entendió, explíquenle a esta pobre ignorante de la vida, o si tampoco lo entendieron pelémoslo a viva voz.

Ahora lo bueno! Dani la serie chistosa se llamaba Koni-chan y es en efecto muy chistosa. Vi varios capítulos en you tube ...sí estoy cesante y qué!
Entonces, la cosa es que todos tienen que verla...o mejor tenemos que verla todos juntos, porque es muy buena, el doblaje es supercalifragilisticuespalidoso!

Uno recomendado especialmente es el de los Chorrocientos mil KONI-RANGERS ....sino los convence sólo ese título. Primero están más locos que yo...pues es un muy buen título. Segundo, si les digo que hay un koni-ranger borroso, un koni-ranger jirafa, un koni-ranger como morado y uno cebra....que están esperando! Tercero...me carga el fondo del cine...maldición! soy una inútil! d'oh me salí del tema, el subconsciente o inconsciente (viste Pauli ahora me confundiste :()

Acabo de fijarme que dentro de los ejemplos de etiquetas de entrada está: motocicleta...algún día tengo que hacer una entrada que merezca esa etiqueta...tengo una nueva meta de vida. No mentira.

En resumen: explíquenme, vean esa custión y eso. Por ahora.

15 marzo, 2007

~Marina la del mar~

Marina estaba tan perdida que al bajar las escaleras no sabía hacia donde ir. Tomando una decisión a la vez, decidió que quería salir a caminar, no es que no estuviera cansada porque de hecho le dolían las piernas y no había dormido más de tres horas luego de comer tirada en su colchón. Y salió así no más, abriendo la puerta y cerrándola tras su espalda.

Caminó derecho hasta que ya no se podía, de lo contrario se hubiera sumergido lentamente en el mar. Mar de pensamientos tenía, luego de vacilar un buen rato considerando sus opciones, se dio cuenta que no sabía lo que buscaba. O si lo sabía, había formas mucho más simples de conseguirlo. Pero si había algo en lo que Marina era experta, era en hacerlo todo más complicado, incluso las cosas más simples. Al fin caminó hacia allá, al cabo que si se arrepentía podía tomar una micro hacia el otro lado. Totalmente lógico, si total ya estaba perdida y de tanto vagar algo encontraría.

Así que caminó y miró mientras su mente buscaba algo que buscar, y de tanto rebuscar se le hizo un nudo y ya no pudo hablar. Confiada en que los soplidos del viento lo desenredarían, igual que cuando el hilo de coser se enreda y basta regalarle un respiro para que se afloje, siguió caminando.

Los semáforos insistían en hacerla pensarlo mejor en cada cuadra, cuando ella se acercaba a más de cinco metros el señor verde comenzaba a parpadear para dar paso al señor rojo justo en el momento en que ella pisaba la esquina; invitándola malévolamente a replantear su camino.

Iba tan buscadoramente* perdida que de repente miró su zapato y pensó: ¡mierda! Que era precisamente lo que había allí. Sus neuronas al segundo siguiente chispearon:¡da buena suerte! Así de enredadas estaban, creyendo dichos de quien sabe donde. Mientras limpiaba su zapato miró al frente para ver si el de verde ya había aparecido y en eso un b.v.n.i ** la miró directo a los ojos, tanto que se estrelló contra uno de ellos, y siguió insistiendo fervientemente en seguir por el mismo camino. Así que Marina se vio obligada a bajar la mirada para que él saliera por fin de su ojo. Acto seguido arrastró un poco más su pie sobre el pasto para sacar los restos del deshecho canino. Cruzó la calle y repentinamente como si el nudo se hubiera desarmado decidió que se sentaría en la esquina siguiente y esperaría allí.

Y nunca pudo entender por qué nunca llegó, si ella nunca le dijo.

De repente, aburrida de esperar se puso de pie y se apesadumbró al darse cuenta de que la hora mágica ya había pasado, su sombra estaba de vuelta junto con todas sus búsquedas perdidas.

Pero en un instante, el brillo del dorado papel con las nubes lilas y anaranjadas, dos borrachos gritándose en la calle y la música en sus oídos la hicieron incluso perder su búsqueda, mientras saboreaba el chocolate y mordía una almendra al compás de una de sus muchas queridas canciones.





*Bucadoramente: esa palabra no existe estrictamente y no me importa, al cabo que estrictamente Marina tampoco.
**b.v.n.i. : bicho volador no identificado.

12 marzo, 2007

Así, a propósito de nada, le pregunté:
-Y qué pasa si un día ya no me quedan palabras y ya no hay nada que pueda decir…
-Pero, si ya no hay nada que se pueda decir a nadie.
-No sé si eso es bueno o malo.
-Quizás ninguna de las anteriores.
-Quizás ninguna…vale la pena…
-En realidad, yo aún quería escuchar algunas, pero supe que decírmelas a mí mismo no iba a funcionar.

Se sube un padre con su hijo que entusiasmado pregunta al chófer:
-¿esta micro va a Felicilandia?

Yo me sonreí con ternura, la máxima que se puede expresar a nuestra edad, al menos.
Y él me respondió con una sonrisa irónica:
-Ahí es cuando todavía no sabes que después de que te dicen que sí, tienes que pagar el pasaje, después de todo nadie te lleva a ninguna parte gratis…
-Pero sí, a mí me han llevado…
-¿gratis?
-Sí…¿de qué estamos hablando?
-Claro.

Insultos gratuitos nada raro en estos días, dicen que las cosas que odias en los demás son las que odias en ti mismo. ¿Lo dicen? Lo escuché por ahí y aparece recurrentemente en mi mente. Ahora que estoy resintiendo un poco los comentarios de mi amigo, no será que odio en parte que alguien pueda ser tan pesimista. Tan pesimista como yo. Al fin y al cabo somos todos iguales, igual de no especiales o especiales, da lo mismo, sólo retórica y vocabulario.
Aunque si lo piensas bien en las tumbas al final también te conviertes en palabras. Aprovechando el silencio incómodo, sigo la amena conversación.
- oye…y cuando te mueras ¿Qué quieres que diga tu epitafio?
-…mmm la verdad es que no sé, no lo he pensado, además no quiero que me entierren, me da claustrofobia, prefiero que me cremen o quemen o lo que sea…
-creo que es cremar el verbo…
-ah, bueno. ¿y tú?
-…(tarareo la canción y en tono de broma digo) ¡Confusion! will be my epitaph…
Al parecer no es captado por mi interlocutor, que mirando atentamente al niño, casi con rencor, me responde escuetamente.
-Ah.

Qué desperdicio de broma pienso yo, si era moderadamente mala.
Definitivamente emprendo la retirada con las palabras.
Me paro y desde la vereda le hago un gesto de adiós con la mano, al que responde más animosamente el niño desconocido que mi propio amigo. Debe ser porque él va a felicilandia pienso yo, mientras sigo caminando y en mi cabeza siguen apareciendo palabras As I crawl a cracked and broken path...If we make it we can all sit back...And laugh...But I fear tomorrow Ill be crying...



(***La canción mencionada es de King Crimson y dice "confuisón será mi epitafio. Mientras me arrastro por un camino agrietado y quebrado...si lo hacemos podemos sentarnos...y reir...pero temo que mañana estaré llorando...-o algo así***)

28 febrero, 2007

fue hace más o menos un año



unos días atrás
Yo me preguntaba por qué lo recordaba tanto esa semana
cuando alguien me dijo:
sí, fue por esta misma fecha,
hace un año.
¿Será que estamos programados casi biológica-psiquicamente para recordar?
Porque según creo yo, recordarlo justo ahora, fue totalmente inconsciente.
A modo de recordatorio, homenaje y abrazo imaginario

nieve en el cuello
errante caminante
revoltoso pillo
obsevador silencioso
neroncito

(que mamón me salió pero no importa, así es.)

06 febrero, 2007

lista de olores

lista de olores

yo convoco a la Dani! www.esamesma.blogspot.com(y no entendí bien como se hacía pero lo intentaré)

1.- Olor a pasto recién regado por la mañana o al atardecer de un día soleado. Una mezcla de tierra y vegetación, que refresca y relaja.

2.- El olor a metal de las manos al bajarse de la micro o el metro. Que es al mismo tiempo olor a metal y olor a miles de manos que se han apoyado en el mismo lugar.

3.-Olor a papel maché.

4.- Olor a cocina en navidad un mezcla de canela, jengibre, vainilla, clavos de olor harina y otras mezclas que terminan en el olor final a galleta de navidad recien hecha.

5.- Olor a chocolatería....mmmmm.

6.- Olor a hoyo de pared recién hecho con el sonido del taladro aún resonando en los oídos, combinación de concreto, cemento y ladrillo más el roce con el metal.


7.- Olor a amoxicilina tomada en la mañana, horrible y asqueroso.

8.- Olor a humedad de las casas oscuras.

9.- Olor a fotocopia recién sacada con el papel tibio aún en las manos.

10.- Olor a arena, mar y bloqueador en las ropas y en la piel luego de un día de playa.

02 febrero, 2007

Plutón es anarquista.

Las razones por las que la gente está o no está y continúa o no continúa compartiendo su vida no son tan simples, o tal vez son demasiado simples para ser comprendidas.

No basta con que tengan los mismos gustos, no basta con que tengan las mismas ideas con respecto a algunas cosas del mundo, no basta con que tengan una visión parecida de la vida. Y probablemente lo anterior ni siquiera sea necesario.

Yo quizás convencido de que no necesitaba a nadie más me fui a Plutón, como a cualquier otro planeta, no quiero que se sienta especial tampoco. Me fui no sin antes dejar pequeños desastres en la tierra, pero que no influyeron mayormente en su rotación. Ahora sentado sobre una pequeña malformación de la superficie miro con nostalgia a la tierra y descubro que era yo. Era yo el que por querer tener algo asegurado por siempre y nunca atreverme a conocer la soledad, terminó solo en un planeta que ahora ni siquiera será parte del sistema.

Ahora si que soy anarquista, estoy totalmente fuera del sistema, incluso del sistema solar. Y no hay nadie que me impida o me obligue a hacer nada. Estoy solo. Y qué hago, me siento sobre unas deformaciones planetarias a recordar lo que hice, mientras con asombro miro mis manos, las mismas que alguna vez destruyeron castillos de arena y cristal construidos sólo para mi, transformándolos en ruinas sangrantes de piedra. Las mismas manos que ahora tiemblan, sosteniendo la cápsula que me devolverá a la tierra para siempre.

19 enero, 2007

¡la tómbola!


Ayer recordé, mientras veía tele, la tómbola que tenían en Cachureos y me di cuenta que ahora ya ni se usan las tómbolas, ¿o será que yo veo menos tele? ...quizás. Lo que quiero decir, es que me gustaban las tómbolas...sobre todo la de Cachureos, porque como era transparente se podían ver las cartas de diferentes colores, tamaños y formas. Y tú podías decir ¡oh!¡Esa es la mía!(aunque no creo haber mandado nunca una carta), igual la cosa es que era bonito; también era entretenido cuando tiraban las cartas hacia arriba y pescaban una en el aire.

Luego, fue la era de los millones de papelitos minúsculos...los sorteos ya no eran por carta, sino que llamaban desde teléfonos fijos y de unas maquinitas salían muchos papelitos chiquititos y blancos todos iguales en los que salía el número de teléfono por el que identificaban a las personas. Y bueno igual los tiraban al aire para hacerlo más entretenido, no podría asegurar si funcionó.

¿Hoy día? No sé, por lo que veo ahora la gente vota por su celular, en ninguna parte hay papelitos ni cartas (excepto en las cuentas de los teléfonos obviamente)y menos una tómbola. Ahora basta con que hagan una selección aleatoria de los números de celular que seguramente quedan en algun tipo de base de datos. ¿Moderno no? Yo de repente me siento vieja y nostálgica...quizás en el loto o kino aún usan tómbola, hace demasiado tiempo que no veo esa parte de las noticias.

En fin, me carga también que ahora en los peajes y los buses te den de esos papelitos blancos y fomes que después de un tiempo se borran. Y las entradas fomes de ticketmaster. ¿Dónde se fueron los autitos dibujados en los boletos de peajes, las diferencias entre los pasajes de distintas marcas o las entradas a distintos conciertos? Ahora son todos parecidos, por no decir iguales, y quizás después todos los papelitos inútiles de la vida van a ser iguales. ¡que confusión! Ya sé que soy una ociosa, que quizás nadie más se fija en eso y a nadie le importa mayormente, pero a veces pienso que los papelitos inútiles eran más interesantes y originales antes, y no entiendo bien para que los cambiaron. No es tampoco que me lleve todo el día pensando en eso...era sólo un comentario.

[Debo decir que me costó un montón encontrar la foto de la tómbola, y no pude encontrar una de la de Cachureos así que si alguien la tiene me avisa. A lo mejor ni se llaman tómbolas...mmmm]

13 enero, 2007

y en un día invernal como hoy

Sin darnos cuenta caminamos a lo largo de toda esa calle, la más peligrosa de la ciudad, felices y tranquilos. Sin estar conscientes de que era más peligroso aún que siguiéramos juntos después de cruzarla.

11 enero, 2007

¿y entonces cómo es la cuestión?

Leía ayer por la noche un libro, cuando de repente vi que usaban la palabra "consciencia" escrita así, tal cual. Mis pequeñas neuronas saltaron y pensaron y conciencia ...¿no se escribía con c? y consciente con sc. Vaya a saber uno. A pesar de los saltos de mis neuronas no hubo caso de que mi cuerpo se moviera a por un diccionario. Así que las pequeñas desvariaron un rato sobre qué se hace si encuentras una falta de ortografía en un libro, ¿será deber avisar para que lo pongan en la fe de erratas o lo que sea?. De ahí, seguí leyendo y me seguí sorprendiendo pues ¡sorpresas nos trae la vida! En la siguiente página estaba escrita de nuevo pero ahora sólo con c. Conciencia. Fue ahí cuando me pregunté ¿será lo mismo entonces conciencia y consciencia? La respuesta fue no sé. Y cerré el libro y me dormí.

Pero ahora que estaba aquí en el computador lo busqué en la rae...y todavía no sé...es como lo mismo ...pero no...

consciencia.
(Del lat. conscientĭa).
1. f. conciencia.
2. f. Conocimiento inmediato que el sujeto tiene de sí mismo, de sus actos y reflexiones.
3. f. Capacidad de los seres humanos de verse y reconocerse a sí mismos y de juzgar sobre esa visión y reconocimiento.

conciencia.
(Del lat. conscientĭa, y este calco del gr. συνείδησις).
1. f. Propiedad del espíritu humano de reconocerse en sus atributos esenciales y en todas las modificaciones que en sí mismo experimenta.
2. f. Conocimiento interior del bien y del mal.
3. f. Conocimiento reflexivo de las cosas.
4. f. Actividad mental a la que solo puede tener acceso el propio sujeto.
5. f. Psicol. Acto psíquico por el que un sujeto se percibe a sí mismo en el mundo.

¿O sea que puedo usar cualquiera de los dos y da lo mismo? ¿siempre fue así o será nuevo? ¡Y más lo que me demoré en aprenderme que era con c! Así que gente inteligente ¡exijo una explicación! (como mi amigo personal Condorito.) Haganlo con delicadeza para no destruir mi pequeño mundo. Gracias.

(las definiciones vienen directamente de www.rae.es [no rea.es que es el registro de economistas auditores])

05 enero, 2007

Santa Lucía y Simón Bolivar

Me despedí de ti en Santa Lucía. Con mi último esfuerzo te sonreí, fingiendo que todo estaba bien. Mi madre me odia porque voy atrasada y tú no me quieres tanto como pensaba. Me subo al metro, por fin. La libertad del anonimato me permite llorar. Todos me miran y no dicen nada. Voy llegando a Simón Bolívar. Me seco las lágrimas, se terminó mi recorrido.

A la salida una señora me abraza y me pregunta si puede hacer algo por mí. Yo le digo entre sollozos que no es tan grave, pero que muchas gracias. De verdad, muchas gracias.

[el último de los que mandé a santiago en 100 palabras...es el que menos me gusta en todo caso...en fin quiero vomitar y por ende no puedo avanzar en la tesis, ni escribir algo interesante...guacala ...puaj...espero que san viadil haga efecto.]

01 enero, 2007

el primero del primero es uno

El veinticinco del cinco fue el primer día del primer mes del primer año de mi vida.
Hoy es primero del primer mes del dos mil siete.
Y da lo mismo, en el fondo mi año nuevo es mi cumpleaños
Así dice el libro del egocentrismo más puro.
Se acuerdan del año nuevo del dos mil cuando todos se hacían harakiris por el posible desastre de los computadores
Por los ceros
Por la confusión mundial de empezar todo de nuevo
Yo siempre había puesto el año con sus cuatro falsos dígitos
Y en general me equivocaba de año al menos por un año
Así que no me importó demasiado.
Este año me di cuenta que hay personas que conozco desde hace diez o quince años
y me doy cuenta de que tengo veintiuno y no veinte años a cinco meses de tener veintidós.
Y que no hay ningún día cero, desprecian la gran invención de los mayas.
Será porque siempre hay que partir con uno, el primero.
Uno nunca parte de cero.

Hubo muchas buenas fotos que no saqué
Tristes algunas
Absurdas otras
Un cierto temor de qué hacer
cuando no puedes controlar a semejante masa celebradora
y por supuesto me dije
obvio que el próximo año traigo la cámara.

Instantáneas de año nuevo.
[Un señor de apariencia punki tirando challas.]
[Unos chinos con maletas cruzando entremedio de la gente con botellas y vasos en la mano.]
[Una joven vestida elegantemente y con chalas intentando cruzar por una vereda llena de vidrios rotos junto con sus amigas.]
[Dos hombres durmiendo dentro de un auto, mientras afuera, la turba enfiestada buscaba lugares de diversión.]
[Gente bailando, o más bien saltando en el techo de una florería.]
[Un joven sentado en el medio de la calle, ¿durmiendo?]
[Un hombre dando vueltas alrededor de una botella de champaña por razones que desconozco.]
Entre otras. Estas son las chistosas no las tristes. Aún no revelo ese rollo.

Personalmente no le encuentro nada particular al año nuevo. Es sólo un día más. Es un rito lo entiendo. Pero no muy bien. Felices años nuevos para siempre, y felices años viejos también. Y si alguna vez cambian el calendario para que coincida con un cambio de estación o solsticio o lo que sea, quizás, sólo quizás mi pequeña mente en mi pequeño mundo podría comprenderlo mejor.